La Garrotxa es conocida por su naturaleza, sus volcanes, su gastronomía y su vida rural. Y también por sus pueblos.

Así que hoy te recomiendo 6 pueblos con encanto que visitar en una escapada a la Garrotxa.

Mapa de pueblos que visitar en la Garrotxa

Besalú 

¿Te suena la típica postal del pueblo medieval con el impresionante puente? Pues sí, es aquí. Un imprescindible de los pueblos medievales de Catalunya, y su conjunto histórico monumental merece la pena la visita. A parte del famoso puente medieval, en Besalú puedes callejear por su barrio judío, visitar varios monumentos, el Micro Mundi (museo de arte en miniatura), o bajar a dar un paseo por el río Fluvià.

 

 

 

Santa Pau

Tiene su merecido puesto en el ranking de los pueblos más bonitos de la Garrotxa. Santa Pau es más pequeño, menos concurrido, y algo menos «restaurado», lo que para mi gusto le suma incluso más encanto, ya que tiene unos rincones espectaculares. Queda muy cerca de alguno de los volcanes más visitados de la Garrotxa, y de la Fageda d’en Jordà, así que podéis combinar la visita. Además, de aquí son los famosos «fesols de Santa Pau», un aliciente para los amantes de las legumbres, o de los productos locales en general.

 

 

Hostalets d’en Bas

Y si hablamos de pueblos pequeños, tenemos que hablar de Hostalets d’en Bas. Aunque como se suele decir, el tamaño no importa, sobretodo cuando el entorno y sus restaurantes lo compensan con creces. Por eso, si visitáis el pueblo, lo recomiendo combinar con una ruta de senderismo por la Vall d’en Bas, y una buena comida después. Se puede aparcar el coche en la entrada del pueblo, en un parking gratuito, y desde allí se pueden hacer varias rutas caminando para todos los niveles, o también es una zona ideal para las rutas en bici. Incluso los más animados a caminar, pueden subir a Falgars desde Hostalets, y tendrán unas vistas espectaculares de todo el Valle, y unas vistas privilegiadas de los Pirineos. Y después de la caminata, nada mejor que cabar comiendo en uno de los restaurantes del pueblo. ¡Un planazo!

 

 

Castellfollit de la Roca

Y algo diferente, es Castellfollit de la Roca. Su atractivo reside en su ubicación, muy peculiar. Y es que está colgando (casi literal) de un risco basáltico, formado por dos coladas de lava. Se puede pasear por el pueblo que tiene su encanto, para llegar a su extremo, y después bajar abajo a la pasarela a la altura del río, para ver el pueblo desde otra perspectiva. Y si queréis tener la vista lateral del pueblo, donde se ve perfectamente la colada de lava con el pueblo colgando, podéis para con el coche aquí. Si seguís un caminito hay un mirador donde se ve un poco mejor, pero desde el mismo parking tendréis unas buenas vistas.

 

 

El Mallol

Pueblo muy pequeño, y muy tranquilo. Si tenéis oportunidad de ir un día entre semana fuera de festivos, es posible que podáis pasear solos. Pero si queréis verlo con más ambiente, podéis visitarlo durante la Fira de Sant Nicolau del Mallol, el 6 de Diciembre. A parte de ver sus bonitas calles empedradas, la antigua cárcel, y la iglesia, entre otras cosas, estará lleno de puestos de comida local, feria de animales, y un ambientazo que no hay ningún otro día del año. El Malloll tiene unas cuantas cuestas, pero la recompensa son las magníficas vistas de la Vall d’en Bas. Si vais un día tranquilo, y la visita se os queda corta, se puede combinar con els Hostalets, ya que está muy cerquita, y un paseo por la Vall d’en Bas.

 

Beget

Y algunos me matarán por incluir Beget entre los pueblos con más encanto de la Garrotxa, ya que «legalmente» pertenece a la comarca del Ripollés, aunque geográficamente se considera Alta Garrotxa, y hasta el 1969, pertenecía a esta comarca. Pero es que es tan bonito, que hago un poco de trampa. Para llegar, hay que recorrer una carretera con unos paisajes preciosos, igual o más bonitos que el pueblo en sí. Y en otoño los colores son espectaculares. Está un poco lejos, pero realmente merece mucho la pena, ya que como digo el camino es parte del propio encanto.

 

Esta es solo una pequeña muestra de los pueblos con encanto de la Garrotxa. Hay muchos más, y recomendamos salirse de la ruta para dejar que el destino os soprenda. 

 

 

 

TURISMO RESPONSABLE EN LA GARROTXA

La Garrotxa es un destino especialmente comprometido con el turismo sostenible. Y como visitantes, tenemos que ser conscientes de ello, y practicar un turismo responsable, al igual que en cualquier otro destino. 

 

Algunos consejos para turismo sostenible en la Garrotxa:

Respetar los espacios naturales: la Garrotxa se emplaza en un espacio natural protegido, por lo que hay que seguir las normativas que nos indiquen al respecto. Cuidar el entorno es primordial en los parques naturales. Algunas de estas normativas pueden ser caminar solo por las sendas habilitadas, no llevarse nada (rocas, flora, etc), no dejar nada de basura.

Respetar los vecinos: si visitamos los pueblos mencionados en el post, así como cualquier otro, tener en cuenta que en ellos vive gente todo el año. No aparcar el coche en cualquier lugar, no molestar con ruidos innecesarios, respetar sus costumbres, no pisar el campo de cultivo para sacar una foto… etc. Sentido común. 

Consumir productos locales: se trata de una zona con un gran producto gastronómico y de artesanía. Comprar directamente a los productores locales es una buena forma de apoyar a la economía del destino, además de disfrutar de un producto de calidad.

Visitar espacios menos concurridos o fuera de temporada: algunos lugares se han hecho muy conocidos debido a las redes sociales. Diversificar las visitas evitará masificación. Si es posible, visitar la zona fuera de las temporadas altas. Mejorará la expieriencia de la visita, y ayudará a repartir el turismo a lo largo del territorio y del año. 

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